Escritos

Hace algo ya de tiempo que no los deleito con una nueva entrada,
pero si hay algo que tengo muy claro son dos cosas:
Puedes escribir pensando en algo, inspirándote en algo o puedes escribir por escribir, para completar un párrafo.
Yo soy más partidario de la primera, por eso de que me gusta sentirme identificado con lo que escribo, tan solo me queda un mes de colegio, y tengo que aprovechar hasta el final mis oportunidades, todos somos conscientes de la mala situación que recorre España, y por eso todos tenemos que tener claro que no entrar a la carrera a la que aspiramos, puede significar vivir doblemente amargado.
Que no les miento si les digo que desconozco lo que quiero estudiar, pero que quiero ser sincero si les digo que eso me presiona mucho más, que me resulta difícil decir, me da igual la nota, porque en verdad si luego quiero entrar a algo, y no me llega la media me sentiría algo defraudado conmigo mismo, por eso mi último esfuerzo.
Para todos aquellos que me habéis leído según he ido escribiendo, sabréis bien que me gusta hablar de motivación, de sonrisas, de ganas de ser feliz, pero no de unas ganas mías que lo son, sino de transmitiros las ganas a todos.
Por eso desde aquí desde mi cuarto, cuando tengo los libros delante, cuando afronto una realidad que me persigue los últimos años, la de los estudios, cada día más importante, porque cada día más importan tanto para la sociedad, como para a nivel personal me acuerdo de todos ustedes de todo lo que día tras día les digo, porque creo que a veces me hacen recordar lo que para mi siempre fue un objetivo, ser un ejemplo de hombre transmisor de felicidad y de ganas de hacer cosas, ganas de emprender mi vida como una cerilla que por más y más que quema, nunca se apaga.
Espero que entiendan mi ausencia, de vez en cuando subiré alguna entrada pero con menos frecuencia que lo he hecho los últimos meses.
Un saludo Álvaro